El acto tuvo lugar en la parroquia de San Miguel de Pamplona. La parroquia de San Miguel, situada en la plaza de la Cruz de Pamplona, acogió la misa funeral en memoria de Fernando Rodríguez Serena, jugador del Real Madrid entre 1963 y 1968, que falleció el lunes a los 77 años. Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del club, representó al Real Madrid en el acto, al que también asistió Amancio. Butragueño ensalzó la figura de Serena y la de su generación de futbolistas: “El Real Madrid es lo que es hoy en día por el esfuerzo que hicieron todos ellos, que abrieron un camino que el resto ha intentado seguir. Ellos fueron los que marcaron esa pauta y esos valores que están en nuestro escudo. Serena pertenece a esa época y estamos aquí para acompañar a la familia y expresar nuestro respeto por su contribución al Real Madrid". "Su nombre está ligado a la historia del Real Madrid. Ese gol que nos dio el título ante el Partizán está en la memoria y el corazón de los madridistas y hoy es un día muy triste para nosotros”. Amancio también recordó al protagonista de la sexta Copa de Europa: “Era un chaval excelente, muy madrileño, castizo y gracioso. Era una persona muy querida. Me llamó la atención cuando lo conocí por primera vez porque era muy agradable. Como jugador era rápido, habilidoso y un gran futbolista. Estuvo cinco años con nosotros y me acuerdo mucho de su manera de ser porque era un gran compañero.